La Cortina de Hierro de Israel interceptó decenas de misiles aéreos lanzados por Hezbolá

El movimiento islamita Hezbolá se atribuyó el ataque aéreo con decenas de misiles contra el nuevo asentamiento de Beit Hillel, en el norte de Israel, después de que las Fuerzas Armadas de ese opaís anunciaran la muerte de un alto miembro del grupo en un bombardeo en Al Bazuria, en el sur de Líbano.

El bombardeo hacia la región de la Alta Galilea fue neutralizada por la Cúpula de Hierro, sistema móvil de defensa aérea israelí, que lanzó interceptores de misiles tierra-aire para evitar que el ataque llegue a destino. La muerte de Ali Nazih Abed Ali, oficial superior del Frente Sur del grupo yihadista, en un ofensiva israelí sobre el suroeste de Líbano, fue el detonante de la agresión.

En un comunicado en la cadena de televisión Al Manar, el partido-milicia chií libanés expresó: "El asentamiento sionista de Beit Hillel fue blanco de sus ataques en respuesta a los ataques llevados a cabo por el enemigo israelí contra aldeas del sur del Líbano y dirigidos contra los hogares de personas inocentes", en alusión a la agresión israelí este sábado sobre las localidades libanesas de Kfar Kila y Deir Siriane.

Este ataque se produce en medio de un aumento sin precedentes de las tensiones en Medio Oriente con la muerte del comandante de Hezbolá, Fuad Sukr y, sobre todo, del líder político de Hamás, Ismail Haniye, estrechamente vinculado al movimiento islamita, tras un ataque ocurrido en Teherán y atribuido a Israel.

Las muertes de ambas figuras intensificó la crisis e Irán anunció represalias tras este ataque. El líder supremo iraní Alí Hoseiní Jamenei había ordenado lanzar un ataque directo contra Israel, luego de una reunión con el Consejo Superior de Seguridad Nacional.

Jamenei había advertido en un comunicado que "con este acto, el criminal y terrorista régimen sionista (Israel) ha preparado el terreno para un duro castigo y consideramos que es nuestro deber vengar el asesinato en el territorio de la República Islámica de Irán”.

Mucho temor por la escalada militar en Medio Oriente

La preocupación por una escalada militar en Medio Oriente crece ante las amenazas de Irán y sus aliados contra Israel. La presencia militar de Estados Unidos en la zona, la suspensión de conexiones aéreas y el llamado de las Cancillerías de varios países a salir del Líbano y evitar viajar a Israel son algunos de los síntomas de un estallido general en Medio Oriente que se asoma.

"Las tensiones son elevadas y la situación podría deteriorarse rápidamente", advirtió el ministro de Exteriores de Reino Unido, David Lammy, y agregó: "Mi mensaje a los ciudadanos británicos allí es claro: váyanse ya".

Los jefes de las diplomacias de Estados Unidos y Francia, Antony Blinken y Stéphane Séjourné, instaron en una conversación telefónica a todas las partes a la "máxima moderación, para evitar una conflagración que tendría consecuencias devastadoras para los países de la región", indicó la cancillería francesa.

En este contexto, la aerolínea turca Turkish Airlines canceló este sábado, por segunda noche consecutiva, sus vuelos nocturnos a Teherán, sin ofrecer explicación.