El Granate se coronó en una final vibrante y extensa contra Atlético Mineiro, que terminó en la definición desde los doce pasos. La estrella indiscutida que llevó al equipo a la gloria continental fue el arquero Nahuel Losada.
El arquero fue figura en los 90 minutos y se vistió de gigante atajando tres penales en la definición. Su conmovedora historia de ascenso y lucha en el fútbol argentino.
El Granate se coronó en una final vibrante y extensa contra Atlético Mineiro, que terminó en la definición desde los doce pasos. La estrella indiscutida que llevó al equipo a la gloria continental fue el arquero Nahuel Losada.
Tras empatar 0-0 en un partido donde fue un muro inexpugnable, con una tapada "a lo 'Dibu' Martínez" incluida, Losada se transformó en héroe en la tanda de penales. El guardametas atajó tres disparos cruciales, selló una performance memorable y le dio a Lanús el segundo título internacional de su historia.
La imagen de Losada alzando el puño tras la última atajada, cubierto por sus compañeros, fue el cierre épico de una noche que quedará grabada en la historia Granate, y también en la del fútbol argentino.
La historia de Nahuel Losada es la de un profesional que pensó en dejar el fútbol en múltiples ocasiones y que tuvo que buscar trabajos paralelos para sostener a su familia mientras luchaba por su sueño.
El propio Losada confesó que, mientras cursaba las inferiores en Estudiantes de La Plata, debió trabajar. "Me ha tocado ser padre muy joven y mi papá era poseedor de un taxi. Para darme una mano y solventar gastos, me lo daba para manejarlo", recordó el arquero, agradecido por ese apoyo fundamental.
Su camino en el fútbol fue un largo recorrido por el ascenso: después de debutar en Estudiantes, pasó por Unión de Mar del Plata, Atlanta, tuvo dos ciclos en All Boys y hasta una experiencia internacional a préstamo en Deportivo Pasto (Colombia).
Fue su paso por Belgrano, club al que llegó en 2020, donde logró un ascenso histórico en 2022 con el sufrido y recordado triunfo 3-2 sobre Almirante Brown, lo que le dio el espaldarazo final antes de llegar a Lanús.
Hoy, con la Copa Sudamericana en sus manos, Losada dejó un mensaje de resiliencia: "Me costó mucho, remé mucho para estar en este momento... El esfuerzo paga. El mensaje es que la sigan remando, que el fútbol paga". El premio a la perseverancia quedó plasmado en una noche histórica.