Cuál es el teatro más antiguo de la Ciudad de Buenos Aires: ¿cuántos años tiene?

Desde hace más de 150 años, una sala emblemática se mantiene como testigo de la historia cultural de la Ciudad de Buenos Aires. Se trata del espacio escénico más antiguo que continúa en funcionamiento, conservando su estructura y aportando valor al patrimonio arquitectónico porteño.

Ubicado en una zona estratégica de la ciudad, este teatro, además de guardar el recuerdo de sus distintas denominaciones a lo largo del tiempo, también mantiene el paso de generaciones de espectadores y artistas. Su origen se remonta al siglo XIX, y gracias a diversas restauraciones, sigue vigente como uno de los espacios más representativos del ámbito teatral.

A pesar de intentos por modificar su destino, logró mantenerse fiel a su esencia gracias a intervenciones muy importantes que respetaron su diseño original y lo preservaron como parte fundamental de la historia escénica de América Latina.

teatro liceo

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Qué teatro es el más antiguo de la Ciudad de Buenos Aires

El Teatro Liceo tiene el título de ser el más antiguo de Buenos Aires aún en actividad. Fue inaugurado en 1872 bajo el nombre de El Dorado por iniciativa del empresario francés Tourneville, quien encargó el proyecto al arquitecto Juan Bautista Arnaldi. Su primera sala podía recibir a unas 600 personas y se instaló en el terreno donde solía funcionar la carpa del circo Buckingham.

A lo largo de su historia, adoptó diversos nombres según las compañías y funciones que albergaba, entre estos el Goldoni, Rivadavia, Progreso y Moderno. En 1918, influenciado por un grupo de jóvenes intelectuales que se reunía en una confitería contigua llamada Liceo, adoptó finalmente su nombre actual.

Ubicado sobre Avenida Rivadavia al 1495, frente a la plaza Lorea, este teatro fue distinguido por el gobierno porteño como el más antiguo de la ciudad. También se destaca por ser la sala privada en funcionamiento más longeva de América Latina.

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MUSICALES BAIRES

A pesar de que en 1993 estuvo a punto de ser reconvertido en una casa de apuestas, fue rescatado por la empresa Multiteatro S.A., liderada por Carlos y Tomás Rottemberg. Desde entonces, se llevaron a cabo importantes trabajos de restauración, como el desarrollado en 2006 por el arquitecto Ariel Aidelman, orientado a conservar la estructura y materiales originales del edificio. Recientemente, se realizaron nuevas puestas a punto en conmemoración de su aniversario número 150.