Francisco Paz es un pequeño pueblo de Santa Fe que en su mejor momento contó con una comunidad de 200 personas, pero hoy apenas quedan ocho habitantes. La historia de esta localidad, como la de tantas otras, estuvo marcada por la llegada y el posterior retiro del ferrocarril, lo que llevó a la mayoría de sus residentes a emigrar en busca de oportunidades.
Su fundación se remonta a finales del siglo XIX, con el auge ferroviario como principal motor de crecimiento. En sus años de esplendor, el pueblo se desarrolló gracias a las actividades rurales y la vida social de sus vecinos. Pese a esto, con la desaparición del tren y la falta de trabajo, el éxodo fue inevitable, dejando atrás una comunidad casi desierta.
Actualmente, Francisco Paz mantiene su presencia con apenas dos familias que aún habitan sus calles arboladas. A pesar de la disminución de su población, el pueblo conserva parte de su historia en antiguos edificios y en los relatos de quienes aún permanecen en este lugar.
Francisco Paz
OTMARJ80 en Taringa
Cuál es el origen y cómo llegó a la actualidad el pueblo de Francisco Paz que es histórico en Santa Fe
La historia de Francisco Paz comienza en 1886 con la llegada del tren, pero fue recién en la década de 1920 cuando sus primeras familias se asentaron definitivamente. A medida que avanzaba el siglo XX, el pueblo alcanzó su punto máximo de crecimiento, impulsado por las oportunidades laborales en el sector agropecuario.
Con una extensión de apenas 300 metros y una única esquina, este poblado fue escenario de reuniones vecinales, celebraciones y una activa vida comunitaria. En su mejor época, contaba con diversos comercios y servicios esenciales como una carnicería, peluquería, panadería, almacén, estación de servicio, escuela y oficina de correos.
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El declive de Francisco Paz comenzó con el cierre del ramal ferroviario Pergamino-Cañada de Gómez, perteneciente al Ferrocarril General Bartolomé Mitre. Este trayecto de 143,4 kilómetros unía varias localidades de Buenos Aires y Santa Fe, transportando mercaderías y pasajeros. Pese a esto, con el paso del tiempo, el servicio se suspendió y la mayoría de sus vías quedaron en desuso.
Hoy en día, solo quedan en pie algunos restos de su pasado, como la estación ferroviaria oculta entre la vegetación y el antiguo almacén. La Escuela Rural Nº 95, que en su momento educó a generaciones de niños del pueblo, también cerró sus puertas por falta de alumnos. A pesar de todo, Francisco Paz sigue recibiendo visitas de turistas curiosos que desean conocer la historia de este rincón santafesino que se niega a desaparecer.