Durante el tercer y último debate presidencial de cara al balotaje del domingo que viene, quedaron expuestas las contradicciones del el candidato libertario Javier Milei quien se desdijo de cada una de sus propuestas que dijo durante la campaña.
Durante el tercer y último debate presidencial de cara al balotaje del domingo que viene, quedaron expuestas las contradicciones del el candidato libertario Javier Milei quien se desdijo de cada una de sus propuestas que dijo durante la campaña.
El aspirante a la presidencia desconoció las propuestas que incluía su plataforma electoral como la privatización de la educación universitaria y el sistema de salud.
En primer lugar, uno de los ejes centrales de la campaña libertaria se centró en la privatización de la salud y de la educación pública. Si bien hace varios días Milei había mostrado un giro en su discurso, en el bloque de educación del debate se terminó de deschavar: "En el corto plazo no", desmintiendo su intención de cortar de cuajo el subsidio a las universidades.
Mientras se desarrollaba el eje temático de relaciones exteriores, Javier Milei volvió a ponerse en el centro de la escena luego de decir que "las Malvinas son argentinas y vamos a votar todas las instancias diplomáticas para devolver las islas a la Argentina". Claro, no sonaba extraño de no ser por su conocida veneración a Margaret Thatcher, a quien definió en entrevistas anteriores como "su ídola".
Ante la pregunta de Sergio Massa sobre dicha cuestión, el referente libertario respondió: "En la historia de la humanidad yo señalo que hay grandes líderes, la señora Thatcher lo fue, como el señor Reagan, Churchill y como otros".
En el eje de relaciones internacionales, Milei no se mostró firme ante su postura de romper relaciones con China y Brasil por ser, como definió el, "países comunistas". Por el contrario, y ante el acorralamiento de Sergio Massa, el libertario se desentendió de la respuesta y aseguró que son temas de "economía entre privados".
Otro de los puntos que generó controversia entre los dos candidatos del debate fue la relación con el Papa. En reiteradas ocasiones el postulante liberal ofendió al Sumo Pontífice y, esta noche ante las cámaras dijo que ya le pidió disculpas y agregó: "Estamos dispuestos a recibirlo con los honores de Jefe de Estado. Y no solo eso, sino también de darle los honores propios de jefe espiritual de la Iglesia".
Por último, uno de los temas que más preocupación provocó entre los argentinos tiene que ver con la quita de subsidios en el sistema de crédito y la vivienda. Sergio Massa, apenas comenzado el bloque de economía al principio del debate citó una entrevista con Eduardo Feinmann, en la que Javier Milei aseguró que quitaría "todos" los subsidios. La respuesta del candidato, en el debate fue "ya te dije que no".