José "Pepe" Mujica emitió su voto en el balotaje presidencial de Uruguay, pidió "cuidar entre todos" la estabilidad del país y criticó al mandatario argentino Javier Milei, con quien señaló que "es difícil" tener buena relación porque sus medidas "castigan" a los uruguayos.
El expresidente llegó este domingo a primera hora a la Escuela 149 del barrio El Cerro, en Montevideo, y tuvo que esperar diez minutos hasta que abrieran las mesas de votación. "El gobierno que venga deberá tener la capacidad de crear un clima que permita acercarse a negociar e intercambiar", analizó en rueda de prensa.
El Frente Amplio de Yamandú Orsi controla el Senado, mientras que el Partido Nacional de Álvaro Delgado domina la Cámara Baja, por lo que ninguno de los dos candidatos tendrá mayoría en el Congreso. "Uruguay es un país pequeño pero se ha ganado un reconocimiento de ser estable, de tener una ciudadanía que respeta las formalidades institucionales. No es poca cosa en nuestra pobre y golpeada América Latina", reflexionó Mujica.
"Eso lo tenemos que cuidar entre todos, costó mucho aprender y generar eso porque lo más fácil es tirar y patear todo. Por eso les agradezco mucho a todos los uruguayos", sostuvo. También afirmó que "la política no les construye esperanza" a los jóvenes "porque ven a los políticos como una manga de viejos acomodados".
"Mi futuro más próximo es el cementerio, pero me interesa la suerte de ustedes, los jóvenes, que cuando tengan mi edad van a vivir un mundo muy distinto. Ahora tenemos que desarrollarnos para tener los recursos para meter en la cabecita de nuestros nietos, para que estén listos para lo que se viene", señaló el exmandatario, quien este año estuvo en tratamiento por un cáncer de esófago.
Mujica también opinó sobre la relación del gobierno uruguayo con Javier Milei, otro de los desafíos que tendrá el próximo presidente. "Hay que tratar de que sea lo mejor posible, pero es difícil. Por ejemplo, la medida de la Cuenca del Paraná, subiendo los peajes enormemente, nos castiga a nosotros y a Paraguay, es bravo", alertó.
"Lo de Milei es de los argentinos, no es un problema en el que nos tengamos que inmiscuir. Es un semejante país que no lo vamos a cambiar nosotros, pero como los países no se mudan, tenés que tratar de tener la mejor relación posible, sea el gobierno que sea", concluyó.