Las pizzas son una de las comidas más elegidas por ser muy versátiles y prácticas, desde hacerlas en casa, comerlas afuera o pedirlas de delivery. Para aquellos que desean obtener una masa increíble se deben seguir algunos trucos.
Con simples pasos se puede realizar una excelente preparación obteniendo como resultado una textura increíble.
Las pizzas son una de las comidas más elegidas por ser muy versátiles y prácticas, desde hacerlas en casa, comerlas afuera o pedirlas de delivery. Para aquellos que desean obtener una masa increíble se deben seguir algunos trucos.
Muchas veces la complicación principal suele ser que la masa no se eleve, salga pequeña, o se vuelva un mazacote. Afortunadamente hay ciertos secretos que ayudan a que la consistencia de la masa sea suave y esponjosa y esto permite que se extienda y logre el tamaño deseado.
El primer truco a tener en cuenta es que una vez que esté hecha la masa, debe quedarse en proceso de crecimiento de dos a cuatro horas como mínimo, esto ayuda a que la masa se pueda extender de mejor manera.
Al cortarla a la mitad se tiene que ver en el interior de la masa una textura esponjosa, esto demuestra que se leudo correctamente.
El siguiente truco es poner mucha harina sobre la mesa y encima de la masa para evitar que se pegue en la base en el momento de estirarla.
El tercer truco es evitar el palo de amasar para estirar la mesa, solo se necesita hacerlo con la yema de los dedos lentamente e ir estirando poco a poco. Para lograr que tenga los bordes más gruesos se debe presionar solo el centro de la masa.
El cuarto truco consiste en utilizar las palmas de las manos para estirar mejor la masa e ir girándola con las manos e ir estirando al mismo tiempo hasta lograr el tamaño de la fuente donde se va a cocinar.
El último paso, es airearla con el puño cerrado tirándola hacia arriba y dando giros para que se termine de agrandar la masa. Luego ya está lista para poner la salsa de tomate y luego los ingredientes a elección de cada uno dependiendo de sus gustos y luego directo al horno, logrando conseguir una masa excelente y crujiente.