La cantidad de locales vacíos en las principales áreas comerciales de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) creció 5% interanual durante el bimestre julio-agosto, mientras que el incremento fue del 22,9% en comparación con el período mayo-junio de este año. La mayor parte del incremento se verificó en las avenidas Santa FE, Córdoba y Pueyrredón.
En un relevamiento realizado por la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC), los resultados arrojaron que durante el cuarto bimestre de 2024 se detectó un total de 209 locales en venta, alquiler o cerrados frente a los 170 registrados el bimestre anterior.
Analizando exclusivamente los locales en alquiler y venta (es decir, los ofrecidos) se observó que en alquiler hubo una suba de 13,5% comparado con el periodo anterior (mayo-junio), y con respecto a julio-agosto de 2023, cayó un 14,3%. En venta, en tanto, hubo un descenso de 6,3% en relación al bimestre previo y una baja interanual de 28,6%.
La medición de la CAC, que se realiza desde 2014, incluye a las principales arterias comerciales porteñas. En esta ocasión, se verificaron alzas bimestrales en las avenidas Santa Fe (+16, ó +47,1%), Córdoba (+8 ó +57,1%), Cabildo (+6 ó +75%), Pueyrredón (+5 o +125%), Rivadavia (+4 ó +11,8%) y Avellaneda (+3 ó +60%). Por el contrario, solo hubo caídas en Corrientes (-1 ó -1,9%) y Florida (-2 ó -11,1%).
Taxis, golosinas y asados: los recortes de los argentinos para llegar a fin de mes
La recesión golpea con fuerza los bolsillos de los argentinos y, ante la dificultad para llegar a fin de mes, muchos debieron implementar diversos recortes en sus gastos, desde los más prescindibles hasta los básicos. Taxis, golosinas, salidas, compras de primeras marcas y asados encabezan el ránking de consumos que fueron reducidos por los argentinos.
El dato surge del informe Mood Social de Moiguer Consultora, realizado con base en un sondeo llevado adelante durante julio y agosto. El trabajo dio cuenta de la caída del poder adquisitivo de los hogares y los cambios que debieron implementar para hacer frente a la crisis.
Consultados sobre por qué disminuyeron las compras, el 76% de los participantes del relevamiento contestó que era porque no llegaban a fin de mes, el 35% porque se redujeron los ingresos de su hogar y el 29% dijo que lo hizo para controlar el presupuesto, entre otras respuestas.