Desde 2016, la Verificación Técnica Vehicular (VTV) está vigente en la Ciudad y provincia de Buenos Aires. Esta es una inspección obligatoria que todo vehículo debe hacer una vez al año para poder circular bajo la norma.
El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires pudo constatar que de los casi cuatro millones de vehículos que se inspeccionaron desde 2016 para la VTV, un 20% no logró la aprobación en el primer intento.
Desde 2016, la Verificación Técnica Vehicular (VTV) está vigente en la Ciudad y provincia de Buenos Aires. Esta es una inspección obligatoria que todo vehículo debe hacer una vez al año para poder circular bajo la norma.
Con turno previo y habiendo abonado el trámite, hay que trasladarse a una de las sedes habilitadas -y seleccionadas con antelación- en el horario indicado para que las autoridades chequeen cada elemento de seguridad y mecánica del auto en cuestión. Pero hay problemas que suelen tener los autos que hacen que no puedan pasar las pruebas, especialmente con las ruedas. Te contamos a continuación cuales son los detalles.
El desperfecto más común a la hora de hacer la VTV y de que se rechace esa prueba es en la parte de los neumáticos y se trata de que la silueta no tenga la profundidad mínima legal (1.6mm) o estén en mal estado. Además, para los condicionales, suelen suceder por tener los neumáticos desgastados. Por eso es muy importante chequear el tema de las ruedas.
También, hay otros inconvenientes que muchos pasan de largo y suelen ser motivos comunes por el cual se rechace la VTV:
En caso de los condicionales, los desperfectos más comunes son:
Si lo pasan, los inspectores colocan una oblea en el parabrisas del vehículo que exhibe la aprobación de la inspección y la habilitación para circular. Pero en el caso de ser rechazados, hay dos caminos que se pueden seguir según sea la calificación que se obtenga. Si se cuenta con uno o más defectos graves, se obtiene el rechazo, ya que, argumentan, “la circulación representaría un peligro”. En cambio, si se trata de uno o más defectos leves, se otorga un permiso condicional.
Los conductores, en ambos casos, tienen 60 días para solucionar los desperfectos, acercarse nuevamente a una sede y volver a hacer el trámite sin cargo. Pero, quienes tengan el permiso condicional, van a poder circular con una VTV provisoria mientras que los que obtuvieron el rechazado, no van a poder circular bajo ningún concepto con ese vehículo.