Cantante y compositora, Luísa Gerloff Sonza comenzó su carrera profesional hace 8 años en Brasil, pero con dos canciones junto a Emilia Mernes y Motinha logró posicionarse como una artista internacional que viene a pisar fuerte con un género que no estaba siendo explotado en la industria nacional. "Estoy muy feliz de estar aquí y tener el honor de estar conociendo tantos lugares y personas, haciendo entrevistas y hablando de mi música. Es un placer para mí", cuenta a sus 26 años esta verdadera embajadora del funk y el pop.
La artista ya visitó la Argentina varias veces, y es que se crió en un pueblo fronterizo en el que las cruzadas de país en país eran constantes. "Yo soy de la frontera, en una zona de Brasil donde las ciudades son muy pequeñas como Oberá, Santa Rita, Porto Mauá, Tuparendi. Cuando el río está bajo y hay más sequía, podemos atravesar el río caminando y pasar para Argentina. Es muy cerca, por eso puedo decir que estuve toda la vida aquí. De todos modos, esta es la primera vez que las personas me reconocen y se interesan por mi música, así que es totalmente diferente a todas las otras".
"Creo que mi carrera se desarrollo de una manera muy escalonada, no fue un salto abrupto. Hoy, claro, es muy loco, si tenemos en cuenta que soy de una ciudad de 6.000 habitantes. Intento siempre tener en mi cabeza que sigo siendo la misma persona. Me pone feliz que haya gente que escucha mi música y tener fans. Es un honor y es muy gratificante, pero intento no pensar mi fama en términos de cantidad de seguidores que tengo en redes sociales. De hecho, tal vez debería pensarlo más seguido (risas)", confiesa Luisa cuando le preguntamos qué se siente tener 31 millones de seguidores tan solo en Instagram. "Soy lo que soy porque siempre tuve los pies en la tierra. Puedo ser vulnerable y hablar de mis flaquezas".
Luísa Sonza: "Emilia ahora es para mí una gran amiga y soy fan de su música, pero principalmente de la persona que es"
"Ahora en Argentina creo que sólo conocen mi versión fiestera, pero con el tiempo espero que conozcan mis otras facetas. Yo también escribo sobre mis sentimientos y sobre mi vida, eso lo reflejo en mis álbumes. Trato de hacer toda una historia que parta de algún concepto y en la que pueda reflejar todas mis cualidades. Más allá de que me encante la fiesta, también vivo momentos tristes y me gusta poder hablar de eso. Sería un honor si lo conocieran y les gustase también. Hay dos canciones que puedo recomendarles que se enfocan en mi aspecto más vulnerable: Chico, que es una bossa nova, y Penhasco 2, que fue una colaboración con Demi Lovato. Me gusta caminar por los géneros musicales. Hoy en Brasil no me encasillan en el funk brasileño, por ejemplo, pero porque las personas tuvieron la oportunidad de conocer muchas partes de mí, en cambio en Argentina estoy recién en el comienzo. Si tuviera que elegir un género, diría que me dedico al pop".
Acerca de su amistad con Emilia Mernes y el innegable éxito de sus dos colaboraciones, Sonza reveló que "nos conocimos personalmente grabando el videoclip de nuestra canción, Bunda. Automáticamente empezamos a hablar, nos contamos nuestra historia de vida y nos hicimos amigas. Hubo una química diferente, no es común que pase eso, es especial. Emilia ahora es para mí una gran amiga y soy fan de su música, pero principalmente de la persona que es. Estuvimos juntas en mi casa, salimos juntas y tuve la oportunidad de conocer a la persona detrás de la artista"
"Fueron dos semanas de trabajo compartiendo momentos todos los días y cuando no teníamos que trabajar estábamos juntas también". Lo llamativo es, no solo su química instantánea, sino también su historia similar: Emilia Mernes también proviene de un pueblo chico, Nogoyá, en Entre Ríos y debió hacerse 'de abajo', sin ningún contacto", agregó.
Sobre ese pasado recuerda: "Yo cantaba en casamientos, funerales, en el supermercado. En todo lo que pudiera. Trabajé 10 años en la banda de baile de casamientos, cada vez que me necesitaban yo me presentaba. Hablamos de eso con Emilia también, tenemos muchas cosas parecidas. Creo que por eso tuvimos esa buena onda".