"Señores jueces, Nunca Más": a 40 años del Juicio a las Juntas

El 9 de diciembre de 1985 la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional Federal de la Capital Federal dictó sentencia y condenó a cinco de los militares acusados de crímenes de lesa humanidad, tras 900 horas de audiencias con desgarradores testimonios sobre el terrorismo de Estado en un proceso modelo del accionar civil contra las dictaduras.

El aire estaba cargado de expectativa. Habían sido meses duros, de escuchar testimonios desgarradores, de sufrir por la ausencia de quienes no podían hablar y de recabar toneladas de datos y pruebas que se presentaron en 900 horas de audiencias. Finalmente, el 9 de diciembre de 1985, hace 40 años, la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional Federal de la Capital Federal dictó sentencia y condenó a cinco de los militares acusados de crímenes de lesa humanidad. El Juicio a las Juntas llegaba a su fin, pero se inauguraba una era en la que un pueblo se unía en un grito a los cuatro vientos: Nunca Más.

El tribunal estuvo integrado por los jueces Jorge Torlasco, Ricardo Gil Lavedra, León Carlos Arslanián, Jorge Valerga Araoz, Guillermo Ledesma y Andrés J. D’Alessio. El fiscal fue Julio César Strassera con quien colaboró el fiscal adjunto Luis Gabriel Moreno Ocampo, quienes utilizaron como base probatoria el informe Nunca más realizado por la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (Conadep).

La sentencia dictada el 9 de diciembre de 1985 condenó a cinco de los militares acusados y absolvió a cuatro. Jorge Rafael Videla y Emilio Massera fueron condenados a reclusión perpetua con destitución. Roberto Viola, a 17 años de prisión, Armando Lambruschini a 8 años de prisión, y Orlando Ramón Agosti a 4 años y 6 meses de prisión; todos con destitución.

Juicio a las Juntas 1985
Las audiencias del Juicio a las Juntas se extendieron durante 900 horas entre el 22 de abril y el 14 de agosto de 1985.

Las audiencias del Juicio a las Juntas se extendieron durante 900 horas entre el 22 de abril y el 14 de agosto de 1985.

Además de recibir e investigar las denuncias de secuestros y otros crímenes de la dictadura, la Conadep aportó un modo de ordenar la acusación y las responsabilidades de la represión terrorista del Estado por centros clandestinos de detención.

Durante el juicio, se escucharon numerosos testimonios y se consideraron las presentaciones de los gobiernos de Alemania, Austria, Bélgica, Canadá, Dinamarca, España, Estados Unidos, Francia, Grecia, Italia, Noruega, Países Bajos, Portugal, Reino Unido, Suecia y Suiza sobre ciudadanos de esas naciones desaparecidos en la Argentina.

Años más tarde, en diciembre de 1990, los represores que fueron condenados en este juicio se vieron beneficiados por los indultos que dictó el expresidente Carlos Menem y quedaron en libertad.

Sin embargo, a partir de 2003, la derogación de las leyes de Punto Final y Obediencia Debida, más la decisión de la Corte Suprema de Justicia de declararlas inconstitucionales, los volvió a sentar en el banquillo de los acusados.