A pesar de que desde el Gobierno muestran que la inflación se encuentra en descenso, la crisis se agudiza entre los que menos tienen. Los comedores comunitarios reciben cada vez más personas que acuden para tener un plato caliente.
Esta semana Unicef difundió un informe donde revela que un millón de niños se van a dormir sin comer en Argentina. Cada vez son más las personas que acuden a estos espacios para obtener su única comida del día.
A pesar de que desde el Gobierno muestran que la inflación se encuentra en descenso, la crisis se agudiza entre los que menos tienen. Los comedores comunitarios reciben cada vez más personas que acuden para tener un plato caliente.
El periodista Justo Lamas recorrió la Sociedad de Fomento GABI 1, en la localidad bonaerense de Bernal, que se encuentra en pleno ejercicio de su rol social desde el año 1989. Allí, C5N dialogó con su referente, Mirta Rodríguez, quien aseguró que cada vez son más las personas y familias que se acercan al establecimiento, que cocina más de 10 kilos de comida.
Felicitas es una de las mujeres que se hizo habitual en GABI 1. Con 83 años, relató: "Vengo hace cinco años a buscar comida acá para mí, mis nietos y para mis hijos, uno de ellos está sin trabajo".
Otro de los señores que se encontraba esperando su comida, contó que cartonea desde muy pequeño y también visita la sociedad de fomento para poder comer. "Cobro $3000 por día, me la rebusco juntando cartones, plásticos, papeles, lo que sea que sirva. No me alcanza, pero tengo que seguir", narró.
Según los datos revelados por Unicef, un millón y medio de chicos se saltea una comida por día y al menos, un millón de ellos se va a dormir sin cenar. Además, asegura que 4,5 millones de adultos no completa las comidas días por la falta de ingresos y explica que "priorizan que sus hijos puedan alimentarse".
Desde Unicef expresaron que "el aumento de los precios y el estancamiento económico desde hace más de una década han incidido en la capacidad de generación de ingresos de millones de hogares con niñas y niños". A esta realidad se le suma que "10 millones de chicas y chicos en Argentina comen menos carne y lácteos en comparación al año pasado por falta de dinero".
Esto ocurre porque los ingresos de cais la mitad de los hogares con niños y niñas no alcanzan para cubrir los gastos básicos de alimentación, salud y educación, explicaron desde el organismo. La pobreza "afecta especialmente a las personas que viven en hogares con menos acceso educativo, a los hogares monomarentales, con jefatura femenina o cuando están situados en un barrio popular".
La última Encuesta Permanente de Hogares (EPH) publicada por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), definió que la pobreza aumentó del 44% al 54,8% durante el primer trimestre de 2024. También La EPH hubo un incremento de la indigencia, que subió del 13,8% en el cuarto trimestre de 2023 al 20,3% en los primeros tres meses de este año. Dentro de los 4.700.000 nuevos pobres, 2.800.000 son nuevos indigentes.
Para poder enfrentar esta realidad y marcada por el ajuste, la inflación y la pérdida de poder adquisitivo del salario, desde Unicef afirmaron que se necesita "una combinación de políticas y la protección de los recursos presupuestarios que se asignan a la niñez, que permitan a su vez sostener y mejorar los esquemas de protección de ingresos destinados a familias en mayor situación de vulnerabilidad".