El músico Joaquín Levinton fue protagonista de un episodio insólito en un velatorio de un desconocido. El mediático aseguró "Soy de ir a pasear al cementerio de Chacarita porque me gusta el lugar", reveló.
El músico contó una historia con un desconocido y dejó un pedido al público para cuando muera.
El músico Joaquín Levinton fue protagonista de un episodio insólito en un velatorio de un desconocido. El mediático aseguró "Soy de ir a pasear al cementerio de Chacarita porque me gusta el lugar", reveló.
El líder de Turf compartió lo que es una rutina en el barrio porteño y subrayó: "Es muy lindo, está abierto y tiene muchas calles. (...) Está situado en un lugar muy lindo de la ciudad y me gusta el sector de tumbas de los tangueros”.
El compositor de Pasos al costado estuvo como invitado en el programa Otro día perdido, que conduce Mario Pergolini, en El Trece, y relató que es parte de una costumbre que tiene, incluso cuando viaja: “Estuve en París, hace poquito, y fui a ver a Jim Morrison, a Edith Piaf", detalló.
Aunque dijo que no le gustan los velorios, comentó que pasó a uno sin saber quién era el "homenajeado" y resaltó: “Era a cajón abierto. Vi gente, era gratis y pasé“. Y que nadie lo reconoció porque "el centro de atención era el muerto”. “Lógico”, remarcó Pergolini con ironía.
En este sentido, el artista repondió qué le gustaría que hicieran con él cuano se muera: “Quiero tener mi tumbita. Soy de los que creen que en tu vida fuiste de acuerdo a la cantidad de gente que va tu velorio”.