Hay causas que parecen aisladas, que no tienen conexión unas con otras, pero que forman parte del mismo plan sistemático y estructural para perseguir políticos, empresarios y opositores del gobierno de turno. El famoso lawfare, que se implementó y se profundizó durante los cuatro años de macrismo, contó con el apoyo de servicios de inteligencia, legisladores y jueces, y la participación estelar de algunos medios de comunicación.
Algunos ejemplos: la causa Dólar Futuro, en la que estuvieron procesados la vicepresidenta Cristina Kirchner y el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof; la causa del Memorándum de Entendimiento con Irán, en la que no hubo ningún tipo de prueba y se declaró la inexistencia del delito; y las causas que se originaron contra el Grupo Indalo para asfixiarlo y hacerlo quebrar.
La politización de la justicia y la judicialización de la política son algunos de los mecanismos, las formas y los instrumentos con los que opera el poder real, el poder concentrado.
Natalia Salvo es abogada, docente de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y la Universidad Nacional de José C. Paz (UNPAZ).