La fuerte acusación de Aníbal Pachano a Graciela Alfano: "Sos psicótica y enferma"

Luego de varios meses sin hablar, hoy Alfano salió telefónicamente en Intrusos, donde el coreógrafo estaba invitado. Volvieron a protagonizar una fuerte pelea en vivo.

Aníbal Pachano estuvo invitado hoy en el piso de Intrusos para responderle a Graciela Alfano quien había hablado de él unos días antes.

"Todos sabíamos que Alfano se pasó con el personaje. Cada uno tiene derecho a arrepentirse. Pero esto lo hace porque está a punto de salir  'Showmatch' y ella cree que pidiéndole disculpas al canal y al conductor la habilita a seguir trabajando.

Quiero aclarar que ella no trabaja en el medio pero no por Pachano. Desde que yo entré en el 2009, hacía muchos años que ella no trabajaba, tendrá que ir al analista para trabajarlo", dijo el coreógrafo en referencia a que Alfano estuvo sin trabajo por un año.

Al ser consultado si le cree esta nueva forma con la que se presenta la actriz y su arrepentimiento, Pachano aseguró: "Con Ana no le creímos porque el arrepentimiento empieza por casa. Ella dijo que yo tenía H.I.V, hay que hacerse cargo, lo dijo en privado y hay muchos testigos de la emisora y de artistas. Ella no tenía ningún derecho a decir lo que yo le conté.

Así como yo se lo dije en privado, también tiene habilitación para llamarme y decirme: ´Mirá me equivoque, me fui de mambo, pero en privado y a mi familia. Ella no solo se metió con el HIV, también dijo que yo no era el padre de Sofía", recordó enojado.

"¡Como no te vas a acordar si hablaste de la enfermedad de alguien en privado! ¡Sos psicótica, sos enferma! Ella puede no tener ganas de juntarse, pero puede pedir disculpas públicas. Decir que no tomaba de mi mismo vaso fue una discriminación berreta y poco intelectual. Obvio que vamos a trabajar juntos, porque yo no voy a modificar mi sillón por ninguno de mis compañeros.

Mientras Pachano decía todo esto Alfano salió telefónicamente con una actitud pacifica: "Yo aprendí muchas cosas, hay que hablar. Yo no lo hice en su momento porque me alteré porque se dijeron cosas que yo no hice. Uno puede avanzar y reunirse con sus enemigos sabiendo que ellos te muestran algo para aprender. No me siento ni buena ni santa, soy una pecadora más, no me siento especial solo un ser que aprende. Yo perdono sin que me lo pidan, puedo dialogar pero no lo llamé antes a Aníbal por timidez".

Aníbal, enfurecido, le respondió que él no quería que ella diga nada: "Acá se trata de ser grande, conversar, y pedir disculpas. Cuando yo escuche lo que tengo que escuchar ahí empieza el camino de la unión, que me diga yo lo dije y te pido perdón. Pero no tengo ganas de que se haga la psicoanalista".

Graciela, por su parte, al preguntarle si le iba a pedir disculpas a Aníbal, dijo: "Yo siento que el también tiene que pedirle disculpas a mi hijo. No me gusta que él se burle de mi. Mi hijo me pidió que nunca más hable de Pachano, y me estoy exponiendo. Él se monta en una soberbia".

Pachano se brotó y no quiso hablar más: "Yo no la quiero para nada, ni va a ser mi amiga. Los chicos de Graciela son bárbaros, los vi dos veces en mi vida, está bien que el pidan que no hable de mi, porque al final queda como la buena, y yo quedo como el loco. Me altera que no pueda reconocer  lo que hace públicamente. Graciela tenés que empezar por juntarnos y pidiendo disculpas desde el corazón y la vida, no desde la psicoanalítica.

Finalmente, no hay reconciliación, y ni estamos cerca de eso. Así que todavía habrá  varios capítulos de esta historia.

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