Son amigos y socios, y están en pareja con dos de las
mujeres más lindas de la Argentina. Los chilenos Benjamín Vicuña y Gonzalo
Valenzuela -están junto a Pampita y a Juana Viale,
respectivamente- también comparten otra fama: la de hombres muy controlados y
celados por sus mujeres.
Motivos, ellas tienen. Pampita acaba de ser mamá de
un bebé llamado Beltrán -nada que ver con la recordada actriz
Nelly Beltrán; el chico se llama así de nombre. Y bue...- y estuvo internada en
dos oportunidades en las últimas semanas de su embarazo. En una de esas
ocasiones, entorno cercano a la pareja habló de salidas nocturnas de Vicuña,
salidas con amigos y momentos de "esparcimiento", por así decirlo,
cuando ella estaba con el bombo a punto de explotar.
Aunque desvían el tema, se sabe que Carolina Ardohain es
más celosa y controladora de lo que dicen. Últimamente se dijo que celaba a su
pareja por las escenas hot con Brenda Gandini en "La dueña"
pero a él lo enojan esos rumores: "Es una falta de respeto desde la
mentira" dijo Vicuña, aunque no desmintió algunas giras
nocturnas que le adjudican. Tal vez se trate solo de mala fama, como la que
ella adquirió cuando agarró de los pelos a Isabel Macedo en Punta del
Este por meterse con su hombre.
Gonzalo "Manguera" Valenzuela comparte con Juana
Viale una relación más explosiva, llena de vaivenes y escándalos, que ahora
parece transitar un terreno más tranquilo, ante el nacimiento de Alí
-y dale con los nombres...- que estuvo mal de salud casi recién nacido. Tras
los excesos del pasado y el affaire Martín Losteau y algunos adjudicados
al chileno -otra vez Macedo en la picota en épocas de "Botineras"-
llamó la atención cuando Manguera se fue del sanatorio la misma noche de la
internación de su hijo y terminó en una fiesta en la casa de Esmeralda Mitre
en la que habría tenido un encontronazo con el ex economista.
Las dos parejas son amigas, aunque alguna vez se dijo que
cuando Pampita colaboraba en el vestuario de la obra "La
celebración" que hicieron Juana, Vicuña y Valenzuela, a la
nieta de Mirtha no le caía tan simpático tenerla rondando en el teatro. Y
ellos, los amigos chilenos, galanazos que triunfan aquí, tienen su fama. Y como
toda fama, hay que alimentarla. Por eso, ya sabremos más de ellos.