1 - Hace quince años Marcelo Araujo hacía un chiste cuando relataba y era simpático, ahora lo único que nos provoca es poner la radio para escuchar el partido en la voz de Mariano Closs.
2 - Después de tanto tiempo podría haberse aprendido los nombres de los jugadores, no pega uno ni leyéndolos.
3- Como ve que el fútbol también está pasado de moda, logra relatar jugadas 5 minutos después que pasaron.
4 - Habiendo tanto relator joven, la verdad que seguir teniendo que soportar el relato de Araujo parece un castigo de "Futbol para todos".
5- Logró que pusiera el partido en mute y trate de imaginar el relato. Un plomo. Gracias por todo, pero ya deberíamos ir retirándonos, no Marcelito?
A pesar de todo esto, reconozco que fue un hombre que estuvo fuera de la televisión el día que Torneos y Competencias decidió, como empresa, sacarlo del aire y lo dejó sin trabajo durante varios años.