Inesperadamente, y a pocos días de transformarse nuevamente en papá, con la llegada de su hija Lola, la tragedia golpeó la puerta de Martín Demichelis: su padre Juan Carlos, de 58 años, y su pareja, Mirilla
Beatriz 'lavella, de 57, viajaban en su auto, un Peugeot 207, que luego de despistarse se prendió fuego en la ruta. Ambos murieron dentro del vehículo, sin poder escapar.
Martín llegó a Ezeiza el viernes a las 9.15 de la mañana. Desde allí, por la misma autopista donde perdió la vida su
padre, arribó a Justiniano Posse junto a su hermana Georgina, que ese día
twitteó: "Otra vez la vida me lleva dos ángeles". El
futbolista agradeció por el mismo medio a River Plate: "gracias por
manifestar su luto en este momento de mi vida", y al Málaga, su actual
club: "gracias por el emocionante minuto de silencio".
El domingo,
Martín iba a regresar a España. Pero la visita de un ex técnico de su primer
club, Renato Cesarini, lo hizo quedarse un día más, y el lunes aprovechó para
concluir algunos trámites en una escribanía, donde les hizo un poder a sus
hermanas para que resolvieran qué hacer con los bienes de Juan Carlos. A la
distancia, Evangelina Anderson, le dedicó un mensaje por la red social: "Ojalá pudiera calmar un
poco tu dolor... Acá te esperan nuestras dos razones importantes para seguir
adelante".