La vicepresidenta Cristina Kirchner reclamó que la Argentina deje de lado el programa de gobierno impuesto por el Fondo Monetario Internacional (FMI) y pidió "elaborar un programa propio de crecimiento, de industrialización y de innovación tecnológica" para poder honrar su deuda.
"Si no logramos que el programa que el FMI impone a todos sus deudores sea dejado de lado y nos permita elaborar un programa propio de crecimiento, industrialización e innovación tecnológica, va a ser imposible pagarlo, por más que digan lo que digan", aseguró la titular del Senado durante el acto en Plaza de Mayo por los 20 años de la asunción de Néstor Kirchner.
La exmandataria recordó "cuando Kirchner decía que los muertos no pagan la deuda". Y se preguntó: "¿Se creen que lo van a pagar únicamente con commodities? No, olvídense".
Frente a este escenario, la vicepresidenta señaló que el préstamo al Gobierno de Cambiemos "fue político" y "política tiene que ser la solución". En ese sentido, reclamó "unidad nacional" para resolver el problema.
Los ejes sobre los que debe desarrollarse el programa
La principal referente del Frente de Todos remarcó que la Argentina necesita tres o cuatro ejes sobre los que desarrollar un "programa de crecimiento, de industrialización y de innovación tecnológica".
"Que dejen de querer dirigir la política y clausurarnos la industrialización del país, y convertirnos solamente en proveedores de materias primas. Somos 46 millones. No alcanza únicamente con la materia prima. Tenemos que agregar valor, incorporarle tecnología, para que haya trabajo de calidad y buenos salarios, que es lo que el país necesita. Y se puede hacer, porque nosotros lo hicimos durante doce años y medio", afirmó.
En segundo lugar, pidió "abrir la cabeza" para poder "articular una alianza entre lo público y lo privado". Señaló que la Argentina tiene recursos estratégicos extraordinarios como hidrocarburos y litio. "Gracias a los kukas también recuperamos Vaca Muerta", advirtió, al tiempo que reclamó tener "mirada estratégica" para utilizarlos.
Cristina Kirchner en Plaza de Mayo
También pidió renovar el pacto democrático inaugurado por Raúl Alfonsín en 1983, a partir del retorno de la democracia. "Cuando escucho que dicen 'hay que acabar con el peronismo o el kirchnerismo'... ¡Por favor! Si con ganarle alcanza. No puede haber ningún argentino o argentina de bien que no se oponga a esas prácticas horribles", advirtió.
Por último, la vicepresidenta consideró necesario "volver a darle al país un Poder Judicial que se ha evaporado entre las tramoyas de una camarilla indigna para la historia de la Argentina" y no dudó en calificar a la Corte Suprema como un "mamarracho indigno".
"Los argentinos se merecen volver a tener una Corte Suprema de Justicia que sea llamada como tal sin ponerse colorado. Por favor, se lo pido a todos los partidos políticos de la República Argentina. Tenemos que repensar el diseño institucional. No podemos seguir con la rémora monárquica de personas que son designadas de por vida y que nunca más rinden cuentas a nadie, de nada. No se saben sus declaraciones juradas, no se sabe dónde viven, no se sabe qué tienen", concluyó Cristina.