Las salsas que comúnmente preparamos en nuestros hogares se pueden conservar de diferentes maneras para que no se echen a perder y, en caso de no consumirlas en el momento, se puedan consumir días más adelante. La salsa bechamel es una de las que se puede congelar, al igual que con otros alimentos, y consumirlas tiempo más tarde, sin embargo, es importante conocer el paso a paso para realizar un buen proceso de congelado y de descongelado.
¿Se puede congelar la salsa bechamel casera?
En la gastronomía española e italiana, la salsa bechamel es una de las más utilizadas y su receta está basada en: leche, roux blanco (cocción entre harina y manteca), nuez moscada rallada, sal y pimienta blanca molida. La misma se puede utilizar en diferentes comidas, una de ellas, los canelones.
La salsa bechamel casera se puede congelar y para ello hay que conocer el paso a paso correcto para el proceso de congelado y para el de descongelado. De todas maneras, vale destacar que el sabor no será el mismo que tiene la salsa recién hecha porque al descongelarla, le quedará un poco de agua.
Si vas a usarla en las próximas horas o días, te conviene guardarla en la heladera en una recipiente con un buen cierre. Así, podrás tenerla por 2 o 3 días en perfecto estado, pero si pasan más de tres días, es mejor congelarla.
En el caso de las que se pueden comprar preparadas, se puede congelar o guardarla en la heladera. Se puede conservar por unos días, pero debe estar en un recipiente bien tapada para que no agarre el sabor de otros alimentos.
Cómo congelar la salsa bechamel
La salsa bechamel podrá permanecer en el congelador en buen estado, durante 3 meses y si pasa más tiempo, perderá el sabor original. Es fundamental conocer cómo debe realizarse el proceso de congelado para que se pueda consumir días después. A continuación, el paso a paso:
- Espera que el sobrante de salsa bechamel se enfríe para congelarla.
- Una vez que se haya enfriado a temperatura ambiente, guardala en un recipiente o bolsa para congelador y cierra correctamente para que no adquiera los sabores de otros alimento y no se escape nada de la salsa.
- Coloca una segunda bolsa para congelador y ciérrala herméticamente. Además, tenés que etiquetarla y escribir la fecha de elaboración para saber cuál es el momento para descongelarla.
Cómo descongelar la salsa bechamel
Ahora llegó el momento de saber como tenemos que descongelar la salsa bechamel y para eso, tenés que seguir las siguientes recomendaciones para que consumirla en buen estado:
- Retirála del congelador con tiempo y se sugiere sacarla la noche anterior.
- Guardá la salsa en la heladera para que se descongele sin perder la cadena de frío.
- Como le quedará algo de agua, se recomienda llevar la bechamel a una olla y la recalientas a fuego lento para recuperar parte de la textura.
- Revuelve con un batidor mientras se calienta para que recupere consistencia.
- Probála para terminar de ajustar su sabor antes de consumirla.