¿Altas o bajas? Qué luces debés prender cuando manejas con neblina

La niebla es uno de los fenómenos meteorológicos que más afecta la seguridad vial debido a la drástica reducción de visibilidad que provoca. Manejar en estas condiciones exige conocer las medidas adecuadas para minimizar riesgos y mantener el control del vehículo.

Este fenómeno ocurre cuando aire húmedo y cálido entra en contacto con una superficie fría, formando una densa capa de nubes al nivel del suelo. En rutas y caminos, esto puede dificultar la identificación de señales, otros autos e incluso el trazado del camino, aumentando el peligro de accidentes.

Por ese motivo, usar las luces correctas no es solo una recomendación, sino una necesidad para evitar que la iluminación empeore la situación. A continuación, se dejará una guía sobre qué tipo de luces utilizar y cómo actuar ante la neblina para viajar de manera segura.

Auto niebla

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Cuáles son las luces que debés utilizar cuando manejas con niebla

• Luces antiniebla: Si el vehículo está equipado con este sistema, hay que activarlo. Los faros antiniebla delanteros se encuentran generalmente cerca del suelo, lo que ayuda a iluminar mejor la ruta sin que la luz rebote en las partículas de niebla. Además, las luces traseras de color rojo intenso son fundamentales para que otros conductores puedan detectar el auto a tiempo.
• Luces bajas: En caso de no contar con faros antiniebla, se puede recurrir a las luces bajas. Estas son más efectivas que las altas, ya que las últimas tienden a reflejarse en la neblina, creando un efecto de encandilamiento que reduce aún más la visibilidad.
• Balizas intermitentes: En situaciones de niebla densa, las balizas pueden ser una alternativa adicional para que otros vehículos identifiquen el auto, especialmente en momentos donde se deba reducir la velocidad.
• Evitar luces altas: Es muy importante no prender las luces altas, ya que intensifican el efecto blanco de la niebla, complicando aún más la visión para todos los conductores.

Auto niebla

Auto niebla

Además de ajustar la iluminación, es importante reducir la velocidad y mantener una distancia segura con otros vehículos. Si la niebla es extremadamente densa y se decide detenerse, se debe buscar un lugar seguro como una estación de servicio o una vivienda cercana. Se recomienda evitar frenar bruscamente o detenerse en la banquina, ya que esto puede generar situaciones de alto riesgo.