Expertos analizaron los cambios en el monotributo, régimen simplificado de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) para pequeños contribuyentes, y el impacto del ajuste inflacionario que tendrá sobre el en este 2025. Desde ahora, las escalas se ajustan por el índice de inflación en lugar de la movilidad jubilatoria como se hacía anteriormente.
En este sentido, la asesora tributarista, Elisabeth Piacentini, explica: "Esto hace que las tablas reflejen mejor la realidad económica del país. En julio pasado, las escalas aumentaron un 300%, y ahora, con el dato de inflación de diciembre, se ajustan un 21,13%".
Dependiendo de los ingresos totales en 2024, casi tres millones de monotributistas deberán recategorizarse antes del 5 de febrero. Piacentini, detalló: “Aquellos que facturaron hasta 7,8 millones de pesos pueden quedarse en la categoría A, pero quienes superaron ese monto deberán ajustar su categoría. Es crucial revisar las ventas del año completo y compararlas con los nuevos límites”.
Cómo afecta el ajuste por inflación a las escalas del monotributo de 2025
El ajuste por inflación impacta en las escalas ya que, además de la recategorización, Piacentini advirtió sobre el aumento en las cuotas mensuales que subirán un 21,13%. En este sentido, aseguró: “Aunque no cambies de categoría, vas a pagar más. Por ejemplo, alguien en la categoría más baja, que pagaba 26.000 pesos, ahora pagará 32.000 pesos desde febrero”.
Otro de los temas centrales fue el ajuste en el impuesto a las ganancias. Este año incluye un aumento en el mínimo no imponible. “El salario bruto mínimo para quedar exento será de 2,2 millones de pesos para solteros y 3 millones para casados con dos hijos. Esto ayuda a que muchos asalariados no entren en la escala, pero también hay más personas sujetas a retenciones por conceptos adicionales, como horas extras o adicionales”, manifestó:
En la misma línea, remarcó la importancia de aprovechar las deducciones disponibles para reducir el impacto del impuesto. “Entre las cosas que se pueden deducir están los gastos educativos, las compras relacionadas con el trabajo remoto, los seguros de vida y los intereses de créditos hipotecarios. Estas deducciones pueden marcar una gran diferencia”, afirmó.
La especialista recomienda a cada uno de los contribuyentes que sean proactivos en la planificación de sus impuestos y revisar los gastos y facturación para maximizar las deducciones.