El papa León XIV tuvo más de 20 años en Perú donde fue arzobispo de la diócesis de Chiclayo y lo llevó a adoptar la doble ciudadanía peruana y estadounidense, el país donde nació, ese vínculo lo llevó a recibir un apodo singular.
Robert Prevost estuvo 20 años en suelo sudamericano y recibió el reconocimiento de los fieles andinos y de sus colegas de Chulucanas, Trujillo y Chiclayo.
El papa León XIV tuvo más de 20 años en Perú donde fue arzobispo de la diócesis de Chiclayo y lo llevó a adoptar la doble ciudadanía peruana y estadounidense, el país donde nació, ese vínculo lo llevó a recibir un apodo singular.
El líder de la Iglesia Católica recibió el reconocimiento de los fieles que lo llamaron el "Santo del norte" precisamente porque nació en Chicago, en los Estados Unidos. El padre agustino Alexander Lam compartió funciones con Robert Prevost aseguró que "incluso los obispos del Perú lo llamaban el Santo, el Santo del Norte, y tenía tiempo para todos".
Ni bien se ordenó sacerdote, en 1985, fue enviado a trabajar en una zona de frontera peruana, Chulucanas, con tan sólo 30 años. Después dirigió el seminario agustino de Trujillo durante una década, y más tarde fue nombrado obispo de Chiclayo.
La jefa del Departamento de Teología de la Pontificia Universidad Católica peruana, Véronique Lecaros, recordó: "Su acercamiento a la pobreza hubiese sido distinto sin conocer Perú y meter los pies en el barro, porque no es igual en Estados Unidos".