El Lollapalooza Argentina celebró su décima edición con una primera jornada que encapsuló el espíritu del festival: una combinación de estrellas globales, íconos de la música y artistas que marcan el pulso de la escena actual. Desde el primer acorde hasta el último beat, el Hipódromo de San Isidro se movió con una oferta musical diversa que no dio respiro.
El festival arrancó con una jornada que combinó nostalgia, reinvención y vanguardia. Justin Timberlake deslumbró en su primera vez en Argentina, Alanis Morissette hizo un viaje directo a los noventa con su inconfundible voz, y Ca7riel & Paco Amoroso sacudieron el escenario con su explosivo show. Además, Los Ángeles Azules, Foster The People, Mon Laferte y Charlotte de Witte completaron una noche llena de momentos épicos, coronada por el show de drones más grande de Sudamérica.
Justin Timberlake: el príncipe del pop en su primera vez en Argentina
Uno de los momentos más esperados de la jornada fue el debut de Justin Timberlake en suelo argentino. Con una puesta en escena impecable y una banda destaca exponencialmente el trabajo del artista, el cantante repasó todos sus éxitos, desde Mirrors hasta SexyBack, donde se envolvió con la bandera argentina en un gesto que enloqueció al público. Con una voz intacta y un carisma arrollador, Timberlake demostró por qué es una figura clave en la evolución del pop de los últimos 20 años.
Alanis Morissette: un viaje directo a los noventa
La nostalgia tuvo su momento cumbre con Alanis Morissette, quien ofreció un show sólido, cargado de emoción y con esa esencia noventera que sigue intacta. Su voz, potente y envolvente, llevó a los fans a una época dorada, con hits como Ironic, You Oughta Know y Hand in My Pocket. En un festival con una grilla en constante cambio, Alanis fue la conexión perfecta con el pasado, recordando por qué su música sigue siendo relevante.
Ca7riel & Paco Amoroso: el show más explosivo de la jornada
Si alguien logró sacudir al público de principio a fin, fueron Ca7riel & Paco Amoroso. La dupla argentina volvió al festival con un despliegue impactante, presentando por primera vez en vivo su nuevo EP *Papota*. Con un show que mezcló humor, crítica a la industria y una puesta visual alucinante, lograron uno de los momentos más memorables del día. Desde Ouke hasta #Tetas, cada tema fue una fiesta, con el público entregado al desenfreno y la energía avasallante del dúo.
Los Ángeles Azules: los reyes de la reinvención conquistando el Lolla 2025
En un festival con tendencia al indie y el rock, Los Ángeles Azules demostraron que la cumbia es universal. Con más de 40 años de carrera, la banda mexicana convirtió el Hipódromo en una pista de baile, reafirmando su vigencia y capacidad de reinvención. Acompañados por la voz de Ángela Leiva en algunos temas, lograron uno de los momentos más eufóricos de la jornada.
Mon Laferte: emoción y autenticidad sobre el escenario
Con una puesta sencilla, pero cargada de sentimiento, Mon Laferte sorprendió al llenar su escenario y dejó una de las frases más comentadas de la noche: "Pensé que no vendría nadie, que todos iban a ver a ese Justin... Esto es por ti, Britney". Con su voz única y un repertorio que abarcó todas sus facetas, conquistó al público en un show que combinó dulzura, potencia y dramatismo.
Foster The People: himnos indie para una generación
Hablar de Foster The People es hablar de la banda que marcó el sonido indie de 2014. Con un setlist que repasó su trayectoria, la banda liderada por Mark Foster logró una de las performances más bailables del día. Por supuesto, Pumped Up Kicks fue el momento de máxima euforia, pero el show en su totalidad fue una celebración del indie pop que definió una era.
Un final de alto impacto con el show de drones
Antes de la última tanda de shows, el cielo se convirtió en el protagonista con el show de drones más grande de Sudamérica. Más de 1.100 luces formaron figuras icónicas de la historia del festival, creando un espectáculo visual inédito que reforzó la sensación de estar viviendo una edición histórica.
La primera jornada del Lollapalooza Argentina 2025 dejó la vara altísima. Entre nostalgia, vanguardia y fiesta, el festival celebró su primera década con un line up que supo equilibrar generaciones y géneros, asegurando que la música siga siendo el gran hilo conductor de esta experiencia única.