Con el calendario electoral en marcha, el Gobierno de La Libertad Avanza comenzó a realizar una serie de capacitaciones sobre la implementación del uso de la la Boleta Única de Papel (BUP), que debutará en las elecciones legislativas nacionales del domingo 26 de octubre de 2025. Esta reforma, contemplada en la Ley 27.781 sancionada en octubre de 2024, marcará un hito en la historia del sistema electoral argentino
La BUP es un pliego único que reúne a todos los partidos y candidatos nacionales de cada distrito. Las listas se distribuyen en columnas verticales (con logotipo, sigla, número y hasta seis colores permitidos por agrupación) mientras que las filas horizontales distinguen las categorías a elegir. En la mayoría de las provincias solo se votará para diputados mientras que Chaco, Neuquén, Salta, Entre Ríos, Río Negro, Santiago del Estero, Tierra del Fuego y Ciudad de Buenos Aires también se votarán senadores.
Las boletas incluye fotografía de los dos primeros candidatos de cada lista y los nombres de hasta los primeros cinco junto a un casillero por categoría para marcar la opción deseada. En los centros de votación habrá también un afiche con la listas completas para aquellas personas que quieran conocer al totalidad de los candidatos que las integran.
El tamaño de la boleta varia según la cantidad de listas que se presenten: desde 25,98cm de ancho para las provincias donde se presenten hasta 10 listas y hasta 66,62cm si superan las 20. La altura, por su parte, varía según el número de categorías: por ejemplo, 14,24cm para una sola, 21,86cm para dos
Boleta Única Electrónica: cómo se vota
El día de las elecciones, cada votante presentará su DNI en el centro de votación correspondiente y recibirá una boleta firmada únicamente por la autoridad de mesa. Luego se dirigirá a la cabina de votación, que puede esta junto a la mesa de los fiscales o dentro de cuarto oscuro, y marcará con una tilde, cruz, tilde o garabato los casilleros correspondientes. El diseño de la boleta no incluye la posibilidad de votar lista completa, por lo que cada votante deberá votar en cada categoría que corresponda según su provincia. Luego doblará la boleta siguiendo la guía impresa al dorso y la depositará en urna sin sobre.
Se prevé aplicar criterios “a favor de la voluntad del elector”: marcas que sobresalgan el recuadro no invalidan el voto, mientras que marcar más de una opción en una categoría producirá un voto nulo. El voto en blanco se registra si no se marca ninguna opción
Cada mesa contará con hasta dos cabinas para agilizar el flujo y proteger la privacidad. Se imprimirán la misma cantidad de boletas que figuren en el padrón de cada mesa más un 5% extra en caso de error. Si el elector equivocó su voto puede pedir una nueva boleta al presidente de mesa. La boleta invalida se deberá meter un sobre que deberá ser enviado al correo junto al resto de la documentación al final del conteo de votos.
Orden y transparencia en las listas
El orden de columnas para cada partido saldrá de un sorteo “doble ciego” que se realizará días previos a la elección, garantizando imparcialidad. Todas las agrupaciones tendrán el mismo espacio, incluyendo aquellas sin candidatos en alguna categoría, donde figurará “No presenta candidato”.
Este diseño, inspirado en los sistemas de Mendoza, Santa Fe y Córdoba, pretende eliminar prácticas como el robo de boletas, el “voto cadena” y el uso estratégico de boletas partidarias. Dicha diseño no incluye la posibilidad de votar lista completa.
La ventajas de la Boleta Única en Papel
Entre las ventajas que tiene la Boleta Única en Papel, el Gobierno destacó:
- Transparencia y equidad: todos los partidos comparten espacio en la misma boleta, eliminando ventajas logísticas o económicas de partidos grandes
- Menor costo logístico: se reduce la necesidad de impresión y custodia de múltiples boletas partidarias
- Modernización electoral: el voto se centraliza, se agiliza el escrutinio y se previenen maniobras fraudulentas .