La promesa que le hizo a su amigo muerto en Malvinas

El veterano Ramón Robles recuerda el momento más dramático y doloroso que le tocó vivir en las Islas.

Ramón Robles llegó a las Islas Malvinas el 23 de abril de 1982 junto con el Grupo de Artillería Paracaidista 4 del Ejército Argentino. "Al principio todo era algarabía, pero desde el 1 de mayo, que empezaron los combates, hasta el 11 de junio, nosotros lo único que podíamos hacer era rezar para que una bomba no nos caiga encima. El que diga que no tuvo miedo, no estuvo en Malvinas", afirma.

"Mi foto de Malvinas es correr desesperado desde mi posición para tratar de llegar al cuerpo mi hermano, mi amigo, que tras un intenso bombardeo fue alcanzado por una esquirla que le reventó el pulmón. El flash que tengo es ver cómo se me escurre de la mano, como si fuera agua, la vida de mi compañero", recuerda el veterano de guerra.

Bajo el ruido ensordecedor de los aviones bombarderos, Robles y sus compañeros hicieron una promesa: "Si alguno de nosotros muere, los demás tenemos que hacer lo imposible para que esa muerte no sea en vano". Y así fue. Su hijo más grande lleva el nombre de su amigo muerto en combate.

MALVINAS. 40 AÑOS, 40 HISTORIAS se propone retratar lo que significó el conflicto bélico en las islas desde las experiencias de los protagonistas, con las voces de los actores que tomaron parte desde sus distintos ángulos. ¿Qué significó Malvinas en la historia del país? ¿Cuáles son, cuatro décadas después, las huellas que podemos encontrar en la sociedad argentina? Un especial con testimonios para rescatar, más allá de las motivaciones y consecuencias políticas que rodearon el acontecimiento, el costado humano de la guerra.

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