Entre las normas de tránsito vigentes en Argentina, una de ellas establece la obligación de que las placas de matrícula de los vehículos estén en condiciones óptimas para ser visibles fácilmente.
Los vehículos cuyas placas de matrícula no sean legibles están obligados a renovarlas para evitar incurrir en una infracción.
Entre las normas de tránsito vigentes en Argentina, una de ellas establece la obligación de que las placas de matrícula de los vehículos estén en condiciones óptimas para ser visibles fácilmente.
En caso de que la placa esté deteriorada o ilegible, podría acarrear una multa que en la Ciudad de Buenos Aires puede ascender hasta los $146.000.
El reemplazo de las placas tiene un costo fijo de $2.310, al que se suman otros gastos como la renovación de la cédula verde, la verificación de infracciones y otros aranceles. En conjunto, estos costos totales pueden superar los $10.000.
El proceso para casos de pérdida, robo o renovación es similar tanto para las placas nuevas como para las antiguas.
Los propietarios deben solicitar un turno en el registro correspondiente a través del sitio web de la Dirección del Registro Nacional de la Propiedad Automotor (DNRPA).
Todos aquellos que realicen el registro de un vehículo durante la vigencia del conflicto deberán utilizar las placas de papel.
Esto también se aplica a aquellos que hayan perdido, roto o les hayan robado la chapa patente. En estas circunstancias, se les proporcionará una versión de papel temporal mientras se espera la producción de la placa definitiva.
Todos los usuarios que hayan recibido o reciban una patente de papel verán extendida su validez por 30 días. Sin embargo, esta medida es temporal y podría ser prolongada si la Casa de la Moneda no logra normalizar su situación.