Kun, el "príncipe" que le devolvió el acordeón a la cumbia

El acordeonista que está arrasando en la industria cumbiera nacional recibió a C5N en su casa de Boulogne para mostrar in situ el lugar donde todo comenzó.

Julián Gómez tiene 30 años y desde hace meses resuena como uno de los referentes de la cumbia nacional. "Nos juntábamos con los pibes y aprendí a tocar el acordeón cuando nos reuníamos a ranchar. Este instrumento me dio la facilidad de no tener que enchufar nada", recordó

El joven que inauguró un nuevo auge del género tropical agregó que "quizás al principio la idea era juntarse a descolgar un rato y divertirse. Empecé a los 20 a tocar, caí con el acordeón y era re molesto. Tocaba solo dos notas y cantaba toda la noche contando las anécdotas que vivíamos con mis amigos y los chicos se cagaban de risa. Así arrancamos, era re divertido porque improvisábamos cumbia. Nos reíamos, le cambiábamos la letra a los temas y así nos fuimos metiendo de a poco- Hoy en día estamos viviendo este sueño".

El contenido que sube Kun a las redes sociales se viraliza constantemente y hoy en día conformó una comunidad sólida que lo sigue a donde quiera que vaya. Una de las cualidades más valoradas es que la banda reúne a vecinos y amigos del barrio. Al respecto, "el Príncipe" rememoró: "Sigo teniendo la banda original con los mismos amigos porque, cuando empecé, me armé un grupo para tocar que eran altos músicos, pero vivían lejos y costaba un montón llegar, en cambio los pibes siempre estaban. Entonces un día le dije a uno: 'Che vos, ¿te animás a tocar un bajo?".

Embed
Ver esta publicación en Instagram

Una publicación compartida por C5N (@c5n)

"Ahí empezó, los fui metiendo. Lo que está bueno es que tengo confianza con los chicos entonces les puedo decir 'esto no acá, esto acá', igual soy paciente. Eso nos hizo crecer: siempre estamos unidos y nos conocemos entre todos. Hoy en día estamos tocando en un montón de lugares y haciendo shows todos los findes. Es re loco", completó.

"Actualmente se reavivó mucho la cumbia y está buenísimo. Como artista se nos abrió las puertas a un montón de lugares. Hay gente que le gusta la cumbia y no le copa ir a bailar, entonces ahora están los streams también como Un poco de ruido. Igual los bailes se siguen haciendo, si bien ahora están más de moda las fiestas. La idea es siempre prepararse para poder dar un buen show y que la gente cuando te vea diga '¡Uh! Qué copado".

El momento que marcó un antes y un después fue el lanzamiento de "Cumbia para la raza", la primera colaboración entre el Kun y Pablito Lescano, leyenda y líder de Damas Gratis. Cuando le preguntamos cómo logró el acercamiento, Julián confiesa: "Yo tengo mi productora Wepa Records en la que laburo con Orco Videos y el dueño es amigo de Pablo. Pudimos hacer un acercamiento con mis primeras canciones que son arriba de El tren de la cumbia, ahí Pablito participó como mezcla y mastering de las canciones. Eso le gustó y me propuso hacer una canción juntos. Le dije 'Bueno, de una' y nos juntamos. Ojalá hagamos otra más. Yo compongo, de hecho compongo más de lo que hago covers, pero en este caso fue un tema de él. Me invitó a interpretarlo, meter mi voz y el acordeón. Ahora estamos con la idea de hacer otra que venga más desde este lado. Estamos contentos porque ese tema nos abrió la cancha un montón, nos empezaron a llamar de eventos, nos cambió mucho".

"Estamos contentos porque el tema con Pablito nos abrió la cancha un montón"

"Una ranchada es una juntada de amigos para descolgar, olvidarnos de la rutina y pasarla bien. Nosotros, en este caso, nos juntamos para hacer música. Me pongo a armar beats, los que quieren prenden el micrófono y pasan, rapean, cantan. Si uno canta algo que está bueno, lo hacemos canción. De ahí surgen las mejores cosas. Finalmente, los chicos y yo somos gente que labura de lunes a viernes, nos levantamos a las 7 de la mañana, siempre fui uno más en la vida. Mantener eso nos da disciplina, le dedicamos a full.

"En realidad cuando nace la cumbia villera se contaban anécdotas del barrio y en algún punto era real que se tornaban picantes. Se contaba mucho eso, ahí se empezó a enlazar la cumbia con lo más under. Desde mi parte, yo cuento lo que sucede en mi barrio con la junta entre amigos, las ranchadas, lo que pasa los fines de semana cuando tocamos, los chicos que lavan las motos en las calles, los que hacen música...".

Inevitablemente, con el reconocimiento llegó la fama, pero a Kun, el príncipe del acordeón, no parece afectarle en lo más mínimo. "La verdad es que no lo pienso, solo sigo trabajando como ayer, como hoy y como mañana. Si sucede algo muy bueno lo recibiré bien, yo seguiré preparándome para dar buenos shows y buenos mensajes para la gente. Trato de no ver la fama, sigo viajando en colectivo. La familia está re contenta. Siempre me apoyan y siempre confiaron en mí. Hoy en día estoy demostrando todo lo que aprendí".

"Lo que más me gustó fue con el primer sueldo pagarle a los chicos. Decirles 'Mirá amigo, esto es para vos. Te lo ganaste'. Y pensar que arrancamos sin nada y ahora recibimos dinero por nuestro trabajo. Es arte, no es fácil hacerlo. Lo mismo me pasó cuando le dije al grupo 'Muchachos, nos busca la combi a las 11', cuando estábamos acostumbrados hasta el momento a hacer un montón de movidas para llegar al lugar o viajar en cuatro autos. De pronto viene una camioneta y vamos todos juntos, es hermoso".

TEMAS RELACIONADOS