El país habla del mesiánico Javier Milei, que por primera vez consiguió una tribuna religiosa, en este caso el gran galpón en la ciudad de Resistencia, provincia de Chaco, que milagrosamente construyó el pastor Jorge Ledesma, junto a su esposa Alicia y sus hijos, luego que 100 mil pesos, en su caja fuerte del banco, se convirtieron en 100 mil dólares.
Hasta ahora este debate publico no alteró la agenda, ni los ánimos, en primer lugar, del obispo en la provincia de Chaco.
Ramón Alfredo Dus es el arzobispo de la arquidiócesis de Resistencia y forma parte de la comisión permanente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) con sede en una casona de Barrio Norte en la Ciudad de Buenos Aires. Dus nació en la provincia de Corrientes hace 69 años y desde hace 12 años maneja los destinos católicos de la arquidiócesis de Resistencia, con un poco más de 500 mil bautizados, desplegados en 28 250 km², con 62 sacerdotes para atender 31 parroquias -muy pocas por el volumen del territorio- y además de la Catedral en el corazón de la ciudad capital del Chaco.
El Papa Francisco le había marcado al arzobispo Dus el cuidado del seminario, donde forman los curas, porque allí es el semillero los ordenados de seis diócesis, en la llamada región NEA, el noroeste argentino.
La última aparición publica de Dus fueron sus declaraciones por el fallecimiento del Papa Francisco, en el mes de abril. El año pasado el obispo de Resistencia había sido noticia por haber viajado al Vaticano acompañado por los líderes sindicales de la Confederación General del Trabajo (CGT) local que reclamaban al gobernador chaqueño que los recibiera.
Por otro lado, los gobernadores eclesiales, los obispos, se agrupan a nivel nacional en la CEA. En su organización tienen la comisión ejecutiva, o sea la mesa chica de conducción de la CEA, que la integran tres obispos y un secretario general. Aún ellos no han dicho nada del mesianismo presidencial.
Sin embargo, brotaron sólo dos posteos en medio del centenar de obispos argentinos.
Marketing populista
Por un lado, el obispo de la diócesis de Avellaneda-Laús, Marcelo “Maxi” Margni, en su cuenta de X escribió este lunes 7: “usar la Biblia para bendecir el ‘salvénse quien pueda’ no es fe: es marketing populista disfrazada de evangelio”, y agregó: “Ni la Escritura es un slogan, ni la libertad es abandono al otro. Fe sin razón es fanatismo. Y libertad sin justicia, puro egoísmo con nombre religioso”.
El dilema de Margni es enorme. Se encuentra en una diócesis ubicada en el centro neurálgico del poder político y económico, además del eclesial, con una diócesis con pata en dos municipios, o sea intendentes, y dentro de la provincia de Buenos Aires. De hecho, en su propio clero tiene sacerdotes que abiertamente hacen campaña por el actual gobierno, y antes por Macri, como es el caso del cura carismático, Fernando Abraham, muy popular sus misas en una parroquia de Lanús.
El otro obispo que posteó en su cuenta de X está en la provincia de Córdoba. Es Sergio Buenanueva, quien dice el domingo 6, por la mañana, que leyó el discurso del presidente Milei en el Chaco y hace un extenso desarrollando diciendo “bienvenido el debate de ideas”.
Desarrolla cuatro puntos, o párrafos. “En el humanismo cristiano, la justicia social es un concepto más rico, complejo y válido. No sólo es distribucionismo a cargo del Estado”. En su segundo punto el obispo titular de la diócesis de San Francisco señaló el riesgo del fundamentalismo: “como ocurre en el integrismo católico: a eludir la mediación de la razón en la interpretación del mensaje bíblico. En su punto tres Buenanueva reivindica al debate público de ideas, que dice “es una inspiración liberal, respeto al otro y rechazo de toda forma de violencia que rebaje la dignidad de los demás”.
Curas con perresía
Más jugado fue el sacerdote vice-titular de Cáritas en la provincia de Misiones y el influencer Pablo Savoia. “Realmente delirante", respondió Alberto Barros cuando el periodista de Radio News le preguntó aquella frase que “el Estado es la representación del maligno en la tierra”. Entonces el sacerdote en Cáritas contó que “uno se sorprende cada vez más del grado de ignorancia, mentira, crueldad, confusiones y violencias que anidan en la palabra y actitudes del presidente”, y planteó que ante “semejante locura si quisiera ser coherente debería de dejar de ser presidente porque entonces preside un ente demoniaco”.
Para este sacerdote que vivió 15 años en la provincia de Chaco Milei “es un presidente que tiene rasgos muy fuertes de anticatólicismo, para mí es un presidente anticatólico, que desprecia profundamente las enseñanzas de la iglesia, que están en sintonía con el mensaje de Jesús. Encima tuvo la caradurez de tergiversa de manera brutalmente mentirosa las propias enseñanzas de Jesús. Que la justicia social es un robo, un virus que le metieron a la gente, un pecado capital por la envidia, es un encono con la iglesia católica, lo llamativo es el contexto cristiano, seguro muchas iglesias evangélicas escandalizadas, y que esta iglesia aplauda es una imagen patética”.
En el reportaje radial además el cura en Misiones sostuvo que Jesús “nos enseña a amar a todos, pero en primer lugar a los últimos (pobres, enfermos, desvalidos), los últimos serán los primeros”, y añadió el cira la parábola del rico “que dejaba a Lázaro en la puerta de su casa y que es incapaz de compartir ni las migajas con el pobre. Ese rico termina mal”.
Respecto de la justicia social señaló que “es la virtud del amor fraterno, porque implica que todo ser humano es imagen y semejanza de Dios, con una dignidad inviolable, independiente de la condición sexual, moral, espiritual, cultural, desde esa dignidad, como hijo de Dios, derecho a una vida digna, que implica vivienda, salud, trabajo y alimentación. Nadie descartado”.
Para cerrar el reportaje el religioso explicó que “virus y enfermedad es todo lo que él propone, como la avaricia, el individualismo, la enfermedad en el corazón de quien con crueldad se desentiende del dolor de los sufrientes, de los jubilados empobrecidos, enfermos sin medicamentos, niños enfermos desfinanciando el hospital Garrahan, quienes se desatienden de los discapacitados, los desocupados. Lamentablemente esto está cada vez más instalado desde la primera magistratura del país”, cerró Alberto Barros de Cáritas Misiones.
Desde el conurbano, partido de San Martín, Pablo Savoia es un cura con casi 89 mil seguidores en su cuenta de instagram. Allí posteó: “las palabras del presidente dan vergüenza ajena. Sea ignorancia o adoctrinamiento no puedo dejar de repudiarlas. Es anticristiano y antibíblico. No puedo creer que haya católicos que sostengan esa postura”. Explicó Savoia que es párroco de Nuestra Señora de la Merced en Villa Ballester y profesor de Teología Fundamental y Eclesiología en la Universidad Católica Argentina (UCA), licenciado en Teología Dogmática (Roma) y técnico superior en marketing digital.