Sergio Alfieri, el médico que coordinó el equipo del Hospital Gemelli durante los 38 días que el papa Francisco estuvo internado, reveló que Jorge Bergoglio "no sufrió" y desmintió que tuviera una crisis respiratoria. Además, dio más detalles sobre sus últimas horas.
"No podemos decir con seguridad si se trató de una hemorragia cerebral o de un derrame cerebral. Pero no murió por problemas respiratorios", sostuvo, en diálogo con la RAI. "No tenía ningún dolor, no sufría y sobre todo, afortunadamente, no notaba nada", añadió.
El médico contó que, durante su último fin de semana, Francisco se había mostrado "desconsolado" al no haber podido cumplir con el ritual del lavado de pies en su visita a los presos de la cárcel Regina Coeli.
"Lo encontramos recuperándose, convaleciente, un poco cansado todavía", transmitió. "Cuando llegué a Santa Marta, el santo padre aún vivía, tenía los ojos abiertos y oxígeno, tenía vía intravenosa, pero no estaba consciente. Teníamos que entender qué le pasaba. Lo ausculté con un estetoscopio en ambos campos pulmonares, pero no era un problema respiratorio", relató.
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El papa Francisco es despedido en la Basílica de San Pedro.
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Alfieri confirmó que las últimas horas del Papa no fueron de agonía. "Seguía vivo, pero estaba en coma. No se dio cuenta; debió haber tenido una embolia, debió haber tenido un derrame cerebral. Puedo decirlo con certeza: el santo padre no sufrió", aseguró.
Además, buscó echar por tierra las hipótesis de una crisis respiratoria como causa de la muerte. "Llegué a Santa Marta entre las 6:20 y las 6:30 de la mañana del lunes. El Papa tenía los ojos abiertos, llevaba oxígeno, pero no mostraba signos de dificultad respiratoria. Confirmo que, antes de morir, no tuvo ninguna crisis respiratoria", subrayó.
Alfieri afirmó que los pulmones de Bergoglio "estaban limpios, no había falta de aire, ni ningún signo que pudiera hacer pensar en una crisis como las que tuvo durante las hospitalizaciones anteriores". Con ello, insistió en que "no tenía ningún dolor, no sufría y sobre todo, afortunadamente, no notaba nada".
"No tenemos confirmación radiológica porque el Papa murió en Santa Marta y no en el hospital. No podemos decir con seguridad si se trató de una hemorragia cerebral o de un derrame cerebral. Pero de una cosa estoy seguro: no murió por problemas respiratorios", señaló sobre las causas de la muerte.
En sus últimos momentos lúcido, Francisco le agradeció a su enfermero personal, Massimiliano Strappetti, por haberle hecho dar una vuelta por la Plaza de San Pedro luego de su oración urbi et orbi.