Un estudio de Harvard reveló el impacto que tiene en la salud pasar por una inundación

En los últimos días, México atravesó un notable incremento en las precipitaciones, lo que originó inundaciones en varias regiones del país. Estos eventos meteorológicos provocaron considerables inconvenientes, afectando la vida diaria de los ciudadanos. En este sentido, un estudio de Harvard reveló el impacto que tiene en la salud pasar por una situación climática de este tipo.

Las fuertes lluvias provocaron que varios vehículos queden atrapados en las zonas afectadas, complicando el tránsito y generando largas filas en los puntos de congestión. En el Estado de México, particularmente en Chalco, miles de familias experimentaron los efectos de estas lluvias, dejando severas inundaciones tanto afuera como adentro de sus casas.

Además, las inundaciones pueden desbordar los sistemas de alcantarillado, liberando aguas residuales y patógenos que contienen bacterias, virus y otros contaminantes peligrosos.

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Cómo afectan las inundaciones a la salud según un estudio de Harvard

Según datos proporcionados por la Universidad de Harvard, las inundaciones albergan agua contaminada con sustancias químicas tóxicas, metales pesados, pesticidas, biotoxinas, aguas residuales y patógenos acuáticos. Cuando estos compuestos se mezclan con las acciones diarias, como caminar y limpiar, se transforman en polvareda microscópica que queda suspendida en el aire. Este polvo, que posee las mismas sustancias dañinas, se distribuye en el ambiente y es inhalado por las personas, lo que puede tener un impacto negativo en la salud respiratoria.

Además, otro riesgo significativo vinculado a las inundaciones es el moho. Este tipo de hongo crece y se propaga en materiales orgánicos que se encuentran húmedos o en descomposición. En los lugares interiores, suele proliferar debido a un aumento en la humedad, que indica problemas con el agua. Tras una inundación, los materiales húmedos dentro de las casas generan condiciones óptimas para el crecimiento veloz de hongos y descomposición orgánica.

Aunque no existe un espacio interior totalmente libre de capas de moho, la exposición a altas concentraciones de éstas se relaciona con distintas complicaciones inhalatorias, incluyendo asma, rinitis alérgica y sinusitis.