El Bank of América publicó un informe en el que proyectó que durante el 2025 el gobierno de Javier Milei impulsará una nueva devaluación y la salida del cepo cambiario lo que llevará el dólar a los $1.400 a fin de año.
El mercado no se termina de convencer de que el Banco Central mantendrá el "crawling peg" en el 1% mensual hasta fin de año.
El Bank of América publicó un informe en el que proyectó que durante el 2025 el gobierno de Javier Milei impulsará una nueva devaluación y la salida del cepo cambiario lo que llevará el dólar a los $1.400 a fin de año.
El mercado no se termina de convencer de que el Banco Central mantendrá el "crawling peg" en el 1% mensual hasta fin de año. Los contratos de dólar futuro exhiben una expectativa de devaluación 10% superior a la prometida por el equipo económico.
Pese a la falta de divisas, a los pedidos del Fondo Monetario Internacional y a las advertencias de economistas sobre los efectos negativos del atraso cambiario, el Gobierno trata de calmar las expectativas de devaluación.
Incluso, el presidente Javier Milei pronosticó que el peso se apreciará en los próximos meses, ante la mayor demanda por parte de la población. En Matba-Rofex, la principal plaza en la que se opera el dólar futuro, inversores se cubren de un ritmo de devaluación algo superior en el corto plazo y esperan que se acelere después de las elecciones.
En el marco de esas proyecciones está la negociación con el FMI, que le pide al Gobierno un mayor ritmo de devaluación para soltarle nuevo endeudamiento. La devaluación implícita en los contratos de futuros promedia 1,7% mensual entre marzo y septiembre, y sube a 2,5% entre octubre y diciembre, según expertos.
Esto implica que incluso para antes de las elecciones los demandantes de cobertura cambiaria prevén un ritmo superior a la tablita de Luis Caputo y Santiago Bausili. La devaluación proyectada hasta fin de año en función de los contratos de dólar futuro es 9,8% superior a la que ocurriría si se sostiene el 1% mensual hasta el 31 de diciembre.
El Gobierno negocia con el FMI un programa que incluya nuevo endeudamiento para reforzar las reservas (las netas son aún negativas en unos u$s6.000 millones), aunque en la city ahora esperan que la discusión se extienda algo más de lo previsto.
Otro tema en el que tienen puesto el foco los operadores es el gran uso de divisas que está haciendo el Banco Central para mantener a raya los dólares financieros. El objetivo es evitar que la brecha cambiaria con la cotización oficial supere el 15%.