El presidente Javier Milei cruzó a la líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, y marcó que "nadie sabe de qué trabaja". Además, la tildó de "pitonisa de la moral" y cuestionó a sus custodios y choferes.
El Presidente cuestionó a la líder de la Coalición Cívica, que respondió que su custodia "es una consecuencia directa de la gravísima realidad criminal que atraviesa la Argentina y de una decisión de la Justicia".
El presidente Javier Milei cruzó a la líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, y marcó que "nadie sabe de qué trabaja". Además, la tildó de "pitonisa de la moral" y cuestionó a sus custodios y choferes.
En una publicación en su cuenta de la red social X, Milei expuso una foto en la que se observó a Carrió en un vehículo junto a un hombre que conducía. "En esta foto se puede ver a la 'Pitonisa de la Moral', que ya no es Diputada Nacional y nadie sabe de qué trabaja, con uno de sus dos choferes (y más de 20 custodios) pagados desde el Gobierno de la Ciudad. Las contradicciones se cuentan solas. CIAO!", apuntó.
En tanto, luego del posteo, la Coalición Cívica le respondió al jefe de Estado a través de un comunicado difundido en las redes sociales. "Elisa Carrió y otras dirigentes de la Coalición Cívica no eligieron tener custodia; tenerla es una consecuencia directa de la gravísima realidad criminal que atraviesa la Argentina y de una decisión de la Justicia", marcó el partido.
"Las vidas de quienes investigaron, denunciaron y lucharon durante todos estos años han sido marcadas por la persecución y las amenazas constantes. Sus familias también sufrieron y pagaron altos costos. El Presidente debe entender que su accionar no solo aumentó los riesgos, sino que también expuso a quien, y a quienes, deberían ser protegidas", enfatizó en esta línea.
También, agregó que "lo que hizo es extremadamente grave y debe asumir la responsabilidad por el altísimo costo de haber estafado a la sociedad al quedar al descubierto el pacto de impunidad con CFK. En este país, durante el gobierno de Menem, mataron y desaparecieron personas. Durante el gobierno de Kirchner también, y no nos olvidemos del magnicidio del fiscal Nisman".
"Esto constituye una persecución política hacia nada menos que una de las principales denunciantes de la mafia K, con la que eligió pactar impunidad", concluyó.