Tini Stoessel y Rodrigo De Paul son tendencia por sí mismos por ser el romance del año. Ya sin esconderse, la pareja impone una moda que marcas y diseñadores se empeñan en renovar.
Tini Stoessel y Rodrigo De Paul son tendencia por sí mismos por ser el romance del año. Ya sin esconderse, la pareja impone una moda que marcas y diseñadores se empeñan en renovar.
Se trata de la logomanía, una tendencia que usan las marcas en la que ponderan su logo con la intención de denotar status y ser reconocidas. Treinta años después, vuelve para reafirmar cimientos en las marcas de indumentaria tras años de pandemia.
Este invierno se convirtió en tendencia e implica, para quienes la usan, que buscan distinguirse de los demás a partir de ropa cara, con los logos bien grandes y visibles, y que significan alto estrato socioeconómico. Además, tiene cierto efecto sociológico dado que este tipo de recursos impacta siempre y cuando haya un otro que lo reconozca.
La realidad es que no solo Tini y De Paul son los principales baluartes, sino que también Kim Kardashian y Rosalía son otras exponentes de esta tendencia que crece y ratifica a las marcas como firmas de lujo.